Elementos importantes para la capacitación antisoborno
La capacitación antisoborno es la herramienta más eficaz en el desarrollo de una cultura de cumplimiento y honestidad. La capacitación antisoborno debe transmitir, con claridad y sin lugar a la menor duda, la gravedad de los actos fraudulentos, corruptos y de soborno.
Para que sea efectiva, es preciso que este tipo de formación incorpore varios elementos clave.
Elementos clave en la capacitación antisoborno
Algunos empleados desempeñan funciones de alto riesgo. Un director de adquisiciones o compras, por ejemplo, tendrá mayor exposición al soborno que su homólogo encargado del área de servicios generales, aseo y mantenimiento. Por ello, la primera consideración es que la capacitación antisoborno debe ser un traje hecho a la medida del usuario.
Es preciso también entender que, mientras en algunos países, invitar a almorzar a un funcionario del gobierno o de una organización con la que se pretende firmar un jugoso contrato es un acto bien visto, en países como Turquía, es considerado un delito. Algunos pagos de facilitación son muy comunes en muchas naciones. Sin ellos, ningún negocio sale adelante. En otros países, son muy mal considerados.
Por ello, la capacitación antisoborno debe ajustarse a cada situación. No obstante, algunos elementos resultan esenciales y no pueden faltar:
Conocimiento de la política antisoborno y las normas de la organización
Todas las organizaciones tienen una política sobre el soborno, una actitud ante él. Esta política, según la organización, puede haberse documentado o simplemente haber sido comunicada verbalmente y con sus actos. Y puede ser más tolerante o restrictiva con determinados actos.
Entonces, un elemento clave en la capacitación antisoborno, es sin duda la política de la organización y las normas que ella haya promulgado para impedir actos de corrupción en su interior o que alcancen a terceros como proveedores, clientes, socios o contratistas.
Planificación de las operaciones para evitar actos de corrupción
La falta de planificación hace que las operaciones sean proclives a la corrupción y el soborno. Y por ello, la planificación debe formar parte de la capacitación antisoborno.
Por ejemplo, si sabemos que se requieren permisos o visas para la exportación de mercancías a un determinado país, hay que planificar esto con anticipación. Así se evita la necesidad o la tentación de “facilitar” de algún modo el proceso. De esta forma, todos trabajarán sobre el mismo calendario y nadie tendrá que verse presionado por el tiempo y recurrir a pagar un soborno.
Disuadir a las personas que tengan intención de sobornar
En el mundo de los negocios debemos tratar con muchas personas a diario, y no necesariamente todas tienen la misma tolerancia cero ante la corrupción. Pero si hacemos saber por anticipado nuestra aversión a ella, es probable que los disuadamos de buscar o proponer sobornos.
Para ello, es muy importante contar con la certificación ISO 37001. Con ella presente en nuestras comunicaciones, en nuestras tarjetas de presentación, en nuestros mails, estamos haciendo una declaración contundente: tratar de solicitarnos o proponernos un soborno es perder el tiempo.
Evitar las condiciones propicias para el soborno
Los que desean ser sobornados u ofrecer un soborno nunca lo hacen en voz alta y frente a varias personas. El corrupto necesita crear la necesidad, y después, generar las condiciones propicias para “proponer el negocio”.
La capacitación debe enseñar al empleado a evitar situaciones comprometedoras. Aunque no tenga nada de malo, es mejor no reunirse “socialmente” con funcionarios del gobierno, por ejemplo. Si es preciso tratar algún tema con ellos, que sea dentro de una agenda pública, programada, y en las oficinas gubernamentales.
También es importante sostener todas las conversaciones relativas al negocio con dos o más personas, que puedan corroborar lo que se ha hablado y que cohíban a una u otra parte a ofrecer o solicitar un soborno.
Software ISO 37001 de ISOTools
Desde ISOTools sabemos que la formación es esencial para alcanzar el cumplimiento de cualquier sistema de gestión. Por ello, el Software ISO 37001, además de permitir optimizar un sistema antisoborno, posibilita al oficial de cumplimiento identificar fácilmente las necesidades formativas de sus empleados y planificar e implementar de modo más eficiente un programa de formación antisoborno dejando evidencias del mismo.
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